El ayuntamiento no ayudó al comercio a sobrevivir, con condonaciones ni disminuciones en los cobros, pero sí le afecta en sus ingresos.
Con total cinismo, el gobierno de Paola Angón, presidenta municipal de San Pedro Cholula, aceptó haber aumentado los impuestos en su iniciativa de Ley de Ingresos 2022, pero justifica con descaro que el incremento fue “conservador”.
La dura medida hacendaria, la aplica cuando el 25 por ciento del comercio de esa ciudad quebró por la pandemia de Covid-19 y los comerciantes que sobrevivieron todavía no se recuperan ni en lo económico ni en lo anímico.
Los cholultecas sentirán el golpe en el bolsillo cuando paguen el servicio de limpia, el agua, el predial, las multas de tránsito, los permisos de funcionamiento y los refrendos, entre otras cosas.
En #DiarioReporter, señalamos que el ayuntamiento que encabeza Paola Angón “sin menor empatía y solidaridad con los ciudadanos, subió los impuestos, a pesar de la pandemia y la crisis económica que azota el país”.
En respuesta, a través de sus redes sociales, el ayuntamiento de San Pedro Cholula, con descaro y sin rubor, confirma nuestra investigación, y pretende justificarse con una narrativa que ni al caso viene: no haber creado impuestos nuevos.
Los ciudadanos cholultecas, así como los propietarios del comercio establecido, verán afectada su economía por la aprobación que hizo el cabildo al ajuste del 3 por ciento en los impuestos municipales en general.
Destacan, multas de tránsito, permisos de construcción, estudios de catastro, multas por clausura de negocios, sanciones de protección civil, impuestos por adquisición de terrenos y viviendas, y servicios fundamentales como agua potable y limpia, entre otros.
La presidenta municipal y sus regidores tal vez ignoren que la Secretaría de Salud del Estado, estima que la cuarta ola de contagios por Covid-19 iniciará a mediados de diciembre de este 2021 o a principios de enero del 2022.
Hecho que tiene fuertes implicaciones sociales y económicas que frenarán el proceso de reactivación financiera en la entidad poblana.
La Asociación de Empresarios de la Vida Nocturna reportó en octubre pasado que la pandemia implicó pérdidas por 350 millones de pesos. En voz de su presidente Guillermo Méndez Morales, lamentó el despido de 4 mil personas al no operar alrededor de 2 mil establecimientos del sector, que están distribuidos en los municipios de Puebla, San Andrés y San Pedro Cholula.
De acuerdo a Francisco Lobato Galindo, presidente de la Red Mexicana de Franquicias, en lo que va de la pandemia de Covid-19, 40% de 1,500 franquicias ubicadas en Puebla y municipios conurbados como San Pedro Cholula, han quebrado, con alrededor de 2 mil 500 despidos. Los propietarios no resistieron la crisis económica.
